Patatas bravas al estilo de Madrid

2/16/2018


Una de las raciones por excelencia de todos los sitios de tapeo de la geografía española, pero que cobra especial protagonismo en Madrid, no en vano parece ser que es la ciudad que las vio nacer.


En cada región se prepara la salsa de una manera, por no decir, que se prepara de distinta forma en cada taberna ó mesón.

Pero en este caso, se trata de patatas bravas al estilo de Madrid, qué aunque pueda parecer lo contrario, la salsa no lleva tomate. Pues sí, la salsa de las buenas patatas bravas de Madrid no lleva tomate y el color rojizo se lo aporta el pimentón de la vera.

La proporción de pimentón dulce y pimentón picante que pongo en la receta la podéis ajustar a vuestros gustos en función del punto de picante que prefiráis. Con esta cantidad, las patatas quedan picantes, pero tampoco se saltan las lágrimas. Y ahora vamos con la receta…

Ingredientes



4 patatas grandes (Patatas Guti)


1/2 cebolla pequeña


3 dientes de ajo


400ml de caldo de jamón ó de pollo


2 cucharadas de vino fino ó manzanilla (opcional)


2 cucharaditas de pimentón dulce de la vera


1 cucharadita de pimentón picante de la vera


1 cucharada y media de harina


¼ de cucharadita con granos de comino


Sal y pimienta


5 cucharadas de aceite de oliva para la salsa + aceite de oliva para freír las patatas



Elaboración de la salsa



Picamos finamente la cebolla y los ajos.

Dejamos preparado un caldo de pollo ó jamón y lo ponemos al fuego para que se vaya calentando.

En una sartén calentamos las 5 cucharadas de aceite, cuando el aceite comience a templarse, echamos la cebolla y el ajo previamente picados y dejamos que se sofría aproximadamente 10 minutos, mientras vamos damos vueltas con una cuchara de madera. Salpimentamos con alegría. 

Bajamos el fuego al mínimo y añadimos el pimentón dulce y picante. Removemos bien con la cuchara de madera durante algo más de 1 minuto.

Volvemos a subir el fuego y añadimos la harina y el comino previamente molido con la ayuda de un mortero y volvemos a remover hasta que quede perfectamente impregnada con el pimentón. Aproximadamente dos minutos para que la harina no sepa a cruda.

Añadimos poco a poco la mitad del caldo y damos vueltas con una cuchara de madera ó con unas varillas hasta que la salsa adquiera consistencia, entonces echamos el resto del caldo de golpe, salpimentamos y continuamos dando vueltas sin parar. Si vamos a echar un poco de vino fino ó manzanilla, este es el momento. Yo desde que he echado el pimentón hasta que he terminado de cocinar la salsa lo he tenido unos 30 minutos. Probamos el punto de sal y rectificamos si es preciso. Trituramos la salsa con la batidora.

La salsa está mejor si la preparas con antelación. Si se hubiese quedado un poco espesa, le podemos añadir un poco de caldo al calentarla.


Con estas cantidades, nos sobrará salsa que podremos guardar en un frasco bien tapado ó tupper dentro del frigorífico y aguanta bien unos 4 días.



Elaboración de las patatas

Pelamos las patatas, las lavamos y las secamos.

Cortamos las patatas en trozos de bocado.

Ponemos una sartén al fuego y cuando el aceite esté caliente, echamos las patatas y bajamos el fuego dejándolo medio/bajo para que las patatas se confiten.  Cuando ya estén blandas, pasados aproximadamente 25 minutos, en función del tipo de patata, subimos al máximo el fuego de la sartén y las dejamos unos pocos minutos hasta que adquieran un poco de color dorado.

Las retiramos del fuego y las ponemos en un plato cubierto con papel absorbente para eliminar el exceso de grasa. 

Las disponemos en el plato ó fuente donde las vamos a presentar. Salamos y echamos la salsa por encima.

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10 comentarios

  1. Muchas gracias por la receta y por la mención. Un saludo

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  2. Nunca he comido estas patatas así!! me encantan como quedan y los ricas que tienen que estar, me las plantas en la mesa y me las como como churros, por aquí no se ven en ningún sitio así. que pena....Bess

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  3. Que ricas¡¡¡¡ m e dejas salivando, que mala eres, me dejas con la miel en la boca, besos

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  4. Como me gustan las patatas bravas es uno de los aperitivos que más se consumen,muy ricas.
    Besos.

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  5. Ah! pues no sabía que no lleva tomate, mira tú!. Adoro las patatas bravas y si, cada comunidad las prepara a su manera, no siempre son a mi gusto pero me gusta probarlas todas, jeje.
    Un abrazo

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  6. Cuántas versiones se ven verdad??
    Además es difícil encontrar unas verdaderamente ricas.
    Yo estuve el pasado octubre en Miami y entré en un restaurante español, "Barcelona" se llama por cierto. Y tengo que decir que ahí tienen las mejores patatas bravas que he comido en mi vida. Me sorprendió muchísimo la calidad que tenían.

    Un beso y gracias por tu visita. Me quedo de seguidora ;)

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  7. Qué bueno! Me llevo la receta porque mi salsa no es para nada la típica: y me encanta la estilo Madrid!!!
    Un besote!!!

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  8. Pondré en práctica tu receta original que desconocía.
    Besos
    http://siempreseraprimavera.blogspot.com.ar/2018/02/el-food-styling-que-es-no-dejarnos.html

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  9. Cuanto tiempo hace que no las como . Es curioso como una misma receta tiene varias versiones .
    Ya mismo me apunto la receta para probarlas así . Pintan de maravilla.
    Un abrazo.

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  10. Que buenas están estas patatas , típicas de Madrid y que ya en muchos bares las ponen con tomate , y también es cierto que cada uno tiene su receta propia ,pero eso si en todos están muy ricas ,te han quedado estupendas
    bss

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