Mezclamos la mitad de las pipas con la harina, el huevo y la manteca. Añadimos la sal.


Diluimos la levadura en el  agua tibia y removemos hasta disolverla.


Añadimos el agua con la levadura en la mezcla anterior. Si se queda muy pegajoso echamos algo más de harina.


Espolvoreamos la mezcla en la encimera previamente enharinada y amasamos unos 8 ó 10 minutos, echando algo más de harina si vemos que cuesta que la masa se nos desprenda de las manos.


Formamos una bola con la masa y la dividimos en función de los panecillos que queramos preparar.


Damos forma a los panecillos y los rebozamos con el resto de pipas.


Tapamos los panecillos con un paño y los dejamos levar hasta que doblen su volumen. Yo los tuve algo más de una hora.


Por último, los metemos en el horno a 200º unos 23 minutos. Sacamos del horno, los ponemos a enfriar sobre una rejilla y a disfrutar.